Capítulo VII
Nueva identidad
Después de las palabras de Urius, ya no supe que contestar, note un tono de decepción en su voz, me sentí muy mal.
El sin más que decirme y yo sin más que contestarle me propuse ir a mi habitación, pero al recordar mi acto de violencia me dio una inmensa ganas de vomitar, y estas ganas eran tan grandes que no pude contenerlas y en vez de ir a mi habitación termine en el baño.
Al día siguiente vi en las noticias, que habían encontrado el cuerpo, mucha gente le tuvo compasión, lastima y pedían por su alma.
Un enojo inmenso invadió mi ser, este maldito infeliz había asesinado a toda un familia entera entre ellos una bebe recién nacido, no estaba ni tomado ni drogado, se encontraba en sus cinco sentidos sabía perfectamente lo que hacía ¿y pedían por su alma? Que gente tan patética y estúpida no puedo creer que digan que no era justo lo que le hicieron.
Apreté los puños tan fuertes que mis unas se clavaron provocando que me desangrara, Urius solo estaba observándome, viéndome, vigilándome.
Apague la tele y corrí al baño ya que las ganas de vomitar regresaron pero ahora no eran de asco, si no del coraje que había sido por culpa de toda esa gente estúpida, ven solo los derechos de los delincuentes, lo asesinos, violadores, secuestradores, estafadores, ladrones y hasta ahora los mas oídos, los narcotraficantes, al ser encerrados viven como reyes, con comida gratis ¿y quién paga todo lo que ellos consumen? Las personas honestas y trabajadoras, pero en este país la justicia no existe.
Mientras me encontraba vomitando lo poco que tenia de comida en mí estomago, recordé a mi padre y a Nicole a la que todavía no puedo llamar madre, pero al recordarlos no fueron cosas muy gratas, el único sentimiento que viene a mi cuando pienso en ellos es rencor, coraje, resentimiento.
Tal vez eso de lo que urius dijo que se sentía tan decepcionado de mi, que ha pasado tanto tiempo y aun no puedo perdonar a mi padre y a Nicole no la puedo llamar madre.
Cuando baje el se encontraba en la cocina, Urius estaba cortando un bistec que se veía carnosos, apetitos y muy jugoso, cuando me dirigí a él, para pedirle disculpas lanzo el cuchillo y me golpeo fuertemente en del cuello , me sostuvo fuertemente del él mientras me miraba a los ojos, con mis manos trataba de apartar las suyas de mi garganta pero no podía quitármelo se acerco a mi oído y dijo-me decepciona que ha pasado tanto y tu furia no la sabes canalizar bien- al momento del que me soltó caí estrepitosamente hincado al piso tosiendo y tratando de respirar, le pregunte ¿de qué estaba hablando?, cuando golpee al ese tipo, lo único que me movía era la furia, volteo contestándome- lo que hiciste solo es asesinato simple, rápido y fácil tu odio y tu coraje canonizarla para torturarlos, es eso infelices, que sientan el dolor, qué sientan agonía que pidan piedad, pero sin que les des piedad.
Al fin pude entender las palabras de urius, y por fin la furia que tengo de mi lo podre usar para el bien del gente y para el mal de los delincuentes.
De ahora en adelante seré una sombre de las calles, una sombre manchada de sangre, pero no sangre inocente, sangre que a la mayoría desea que este desaparezca, seré el temor de las personas que causan daño, seré conocido en el bajo mundo red shadow.